El convencimiento y la participación de las y los empleadores y del personal de mando es muy importante, ya que de ello depende que se realice un adecuado diagnóstico y el diseño de un plan de acción acorde a las necesidades de la empresa. Para ello, la principal labor que tengan las y los promotores de ambientes laborales saludables con las y los empleadores será el darles a entender que el éxito de la intervención dependerá en gran medida de su apoyo.